jueves, agosto 16

Cuando la tierra tiembla.


Se supone que ayer estaba todo genial, de verdad se notaba un día diferente. Muchas cosas lindas me pasaron, me sentía bien en todo los sentidos, sin mencionar que después de una semana de un frío de los mil demonios, hoy salió el sol. Increíble. Hasta pensé en mandarle un mensaje a él y ponerle una cosa así como: "Hoy pasará algo, ha salido el sol, y parece ser un hermoso día". Bueno salimos a la academia a una hora adecuada para poder comprar unas cuantas cosas antes de llegar, mientras caminabamos una de mis amigas pisó excremento de perro (ajjjj) y la otra le dijo no te preocupes a cualquiera le pasa, y además dicen que es de buena suerte. Yo solo atiné a reírme. Ya llegado a la academia y después de una clase que me dormía salimos a comprar unas empanadas, moría de hambre. Sonó el timbre de que debíamos volver a entrar a clase, había pasado aproximadamente 40 minutos de la clase, sentí que la carpeta se movía y no paraba de moverse, pensé que mi amiga temblaba de frío o quería ir al baño, así que la miré y me dijo que pasa, y yo le dije que por favor dejara de moverse así. De pronto una de las alumnas se paro y dijo esto es un temblor (okay, yo le tengo fobia a los temblores). El profesor dijo que no nos asustemos, hasta que todo estaba tan fuerte que todos empezaron a bajar. Me quedé en shock, no sabía que hacer, una de mis amigas me gritó horrible, y cogió mi mochila y dijo que bajara, corrimos por las escaleras sin saber que sucedía, mientras bajaba, la cosa se estaba poniendo aún mas fea, el piso parecía de plástico, sentí miedo, pero no desesperé. Ya cuando estuve afuera, entre en pánico, no sabía donde estaba, que sucedía, la gente alborotada, los carteles que parecían que se iban a caer, las luces que se prendían y apagaban y una luz destellante que alumbro el cielo, okay, era el fin del mundo. No, era un terremoto. No se como llegue a mi casa, no se como salí de todo. Solo podía pensar en mi mamá y como estaba. No podía creer que era mi primer terremoto, cuando yo jure que no iba a estar viva para esto. Después de estar todos juntos ya, en la casa, de lograr que mis amigas también lleguen a las suyas y después obviamente que vino la luz, porque estábamos a oscuras, pude prender la televisión y ver las noticias, que anunciaban a grandes voces el fenómeno de las luces en el cielo, lo terrible del terremoto, y la posible presencia de un Sunami, okay esta vez si era el fin. Me desesperé quería saber del él, quería decirle que lo quería y lo iba a querer hasta en mi muerte, y que nunca se olvidara de mi (se que parezco que exagero las cosas, pero esas ideas se vinieron a mi mente en ese instante). No podía mandar ningún mensaje, no podía hacer ninguna llamada. Felizmente el termino llamándome, hablamos, yo un toque asustada y tal vez parlanchina por los nervios, el calmado, el sereno, el frió y callado como siempre. No importaba, estaba escuchando su voz, oliendo su perfume, disfrutando de su calor vía telefónica. Que idiota suena esto pero es la verdad, es la pura verdad. Me fui a dormir, cosa que casi no pude, pero por lo menos estuve en mi cama. Todo va bien hasta hoy, unas cuantas replicas, unos sustos por aquí y por allá y esas llamadas que animan el maldito día de ayer. Maldito?.. es decir GENIAL. :)

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